NOTICIA 508
Los obispos chinos fieles a la dictadura pedirán a los católicos que adopten como guía el pensamiento de Xi Jinping. INFOCATÓLICA. 22ago22. https://www.infocatolica.com/?t=noticia&cod=44224
Resumen:
En el marco de la 10ª Asamblea Nacional de Representantes Católicos Chinos, el grupo de los organismos controlados por el Partido Comunista Chino, que concluyó el sábado 20 de agosto en Wuhan, el arzobispo de Beijing (Pekín), José Li Shan, ha sido elegido presidente de la Asociación Patriótica de Católicos Chinos. En tanto, el obispo Shen Bin de Haimen dirigirá el Consejo de Obispos Chinos, el órgano colegiado no reconocido por la Santa Sede. Los obispos han demostrado una vez más su sometimiento absoluto a los principios rectores de la dictadura comunista.

En el comunicado oficial del sitio web de la Asociación Patriótica, se informa de que los delegados discutieron «el gran proyecto de transmitir el espíritu pastoral, honrar al Señor y beneficiar al pueblo». Además, «examinaron la causa del patriotismo y las brillantes perspectivas de profundizar en la sinización del catolicismo en nuestro país», con la intención de «mirar hacia adelante», buscando «la verdad y el pragmatismo».
Se menciona expresamente la necesidad de «unir y guiar al gran número de católicos para que adopten como guía el pensamiento de Xi Jinping sobre el socialismo con características chinas para una Nueva Era».
COMENTARIOS
Una gran pena es ver al catolicismo chino someterse al Partido Comunista Chino (PCCH), por medio de la Asociación Patriótica Católica China (APCC) y tener que soportar las imposiciones del gobierno, aunque sean contrarias a la Doctrina Católica. Por principio son anticristianas, al emanar de un órgano comunista. Sabemos reiteradamente que el comunismo es ateo y ha sido condenado por la Iglesia a través de varios pontífices.
Pero más vergüenza sentimos al ver la traición de la iglesia vaticana a los católicos fieles, pues no sólo no condena estas arbitrariedades contra los derechos de Dios y de los hombres, sino que anima a los files a apostatar, los invita a unirse a la APCC. Por otra parte, deja a su suerte y bajo persecuciones terribles a los católicos que quieren permanecer firmes en la fe, como ya se ha demostrado, a costa inclusive, del martirio.
Los obispos dirigentes de la APCC ahora proponen "unir y guiar al gran número de católicos para que adopten como guía el pensamiento de Xi Jinping sobre el socialismo con características chinas para una Nueva Era." ¡Es una locura! Es tanto como, en una contienda electoral, uno de los candidatos pida a sus seguidores, que voten por su oponente; o que un director técnico pida a sus jugadores que metan autogoles...
Los católicos tenemos un solo guía a quien debemos seguir: Nuestro Señor Jesucristo. Solo a Él y a sus enseñanzas depositadas en la verdadera Iglesia tenemos la obligación de creer y obedecer.
El gobierno chino tiene ya varias décadas trabajando en la cinización (chinización) de la iglesia católica. Para eso creó la APCC, organismo que se encargó del nombramiento de obispos y de la ordenación de sacerdotes, sin contar con autorización alguna del Vaticano. De hecho, ya tienen su propia versión de los Evangelios, donde han cambiado los textos para que se ajusten a la ideología del partido comunista.
Recordemos que en China hay dos iglesias católicas: la oficial, la APCC que obedece al PCCH, y la iglesia clandestina, que se resiste a abandonar su fe y quiere permanecer fiel a Roma, aunque saben que Roma los ha traicionado.
Y es que Francisco, a cambio de participar en la elección de obispos, ha dado su apoyo a la APCC y levantado la excomunión que otros papas habían le habían impuesto. Pero en cuatro años solo se han seleccionado seis obispos, cuando hay sedes vacantes en más de una treintena de diócesis.
Pero el problema central con la elección de obispos católicos es que sólo compete a la misma iglesia su nominación y a nadie más. Negociar con el gobierno chino sobre un tema de competencia exclusiva de la Iglesia es degradar su autoridad, a la vez que equivale a reconocer la legitimidad los obispos nombrados por la APCC, que los pontífices anteriores habían excomulgado.
Está próxima la firma de la ratificación del acuerdo secreto entre el Vaticano y el gobierno chino por otros dos años, y Francisco no quiere hacer cosa alguna que lo ponga en riesgo. Es un acuerdo que traiciona a la Iglesia Católica.
Esta traición a los católicos por parte de la iglesia actual ha sido denunciada hasta el cansancio por el cardenal Joseph Zen, obispo emérito de Hong Kong, quien como dato adicional, en breve será juzgado, a sus 90 años, por el supuesto delito de no registrar correctamente un fondo de ayuda humanitaria a favor de la democracia del cual era fideicomisario. Junto con él hay otros líderes católicos. ¿Cuál ha sido la reacción del Vaticano por el arresto del cardenal Zen? En su ayuda, ninguna. Solo han afirmado que este juicio no interferirá con la firma del próximo acuerdo con China.